¿Y si le acaricio …? ¿reforzare el miedo o la inseguridad? Pues deja que te diga que no. El miedo es una emoción primaria negativa y tiene una función de supervivencia. Las emociones no pueden reforzarse. No son pensadas. No piensas voy a tener miedo, sino que el miedo aparece, te inunda … sino ¿Quién desearía tener miedo?
Cuando un perro muestra alguna conducta indeseada tenemos que ser capaces de identificar si es pensada o no. Muchas de las conductas indeseadas son consecuencia del estado emocional. Si nuestro perro llego a la conclusión de que haciendo algo, consigue lo que quiere estamos ante una conducta pensada. Fácil solución. En este escenario la forma de trabajar es muy sencilla, evitando que pueda acceder a su premio. Si somos capaces de que cumplir con esto la conducta desaparecerá. Esto es lo que denominamos extinción. La conducta desaparecerá. ¿Cuando? Dependerá de lo “cabezón” que sea tu perro. Durante el proceso de extinción la conducta indeseada se puede ver aumentada o incluso surgir nuevas para obtener lo que quiere. Por eso es tan importante que no alcance su premio de ninguna manera.
Vamos a poner un ejemplo:
“Tenemos una papelera donde tiramos restos de comida. Nuestro perro aprende que si mete el hocico puede levantar la tapa y … fiesta”
Un plan de actuación en esta situación va desde la más simple, quitar la papelera del alcance del perro. Cuanto más sencillo mejor para todos. Pero si por cualquier motivo quieres dejarla a su alcance recuerda evitar que pueda abrir la tapa. Con el tiempo dejaría de intentarlo y la conducta desaparecerá (extinción)
Ahora bien imagínate que tu perro tiene miedo a los petardos. No piensa simplemente el miedo como medio de supervivencia le hace actuar. Ladrar, huir, esconderse, temblar o quedarse paralizado pueden ser algunas conductas que muestre. Estas conductas no se verán reforzadas con ningún tipo de premio ya sea caricias o comida. Por lo que lo mejor que podemos hacer en esta situación será brindarle apoyo. Piensa un momento en ti mismo/a, piensa en un momento en el que sentiste miedo. Qué crees que hubiera ocurrido si estando con alguien este te ignorase o incluso peor … te diera golpecitos o te gritara porque no le gusta que tengas miedo. Piénsalo un momento … ¿Cómo te sentirías? Peor … ¿verdad? pues es lo mismo que le ocurre a tu perro.
Ante una situación de miedo en tu perro en vez de pensar en reforzar preocúpate de sacar a tu perro de la situación y brinda compañía tranquila pero lo que bajo ningún concepto debería hacerse seria llevar al perro hacia lo que de miedo, regañar o corregir esas conductas seria muy injusto y nuestro querido vinculo comenzara a deteriorarse. Ya veremos como podemos ayudarle con los miedos pero eso lo dejamos para otro articulo.