Recientemente, bueno ya hace casi dos meses me encontré un gatito en la calle. Lo recogí y lo metí en casa con mis dos perritas, Polar y Abby. No sabia muy bien que iba a ocurrir puesto que ninguna de las dos había convivido antes con un gato, al igual que yo. Dee Dee no me preocupaba en exceso puesto que al ser muy jovencita imaginaba que seria sencillo. Con Polar tenia mis dudas y no sabia si al final tendría que buscarle un hogar al gatito.
Pues os puedo decir que Michi, como se llama el gatito, se ha quedado con nosotros. Aun con ciertas precauciones cuando no estoy en casa. Pero en general la convivencia esta siendo muy agradable entre todos. Dee Dee juega mucho con él, y Polar pasa de el. Además Michi que no es tonto sabe que puede hacer de rabiar a Dee Dee. De Polar ya se ha llevado algún «susto». Polar dirá, a mi déjame de tonterías que ya tengo una edad.
El primer punto fueron las presentaciones. Estas fueron lógicamente en casa y con el gatito en brazos. Era muy pequeñito. Tanto Polar como Dee Dee se acercaron a husmear. Polar le chupaba, imagino que para obtener información de aquella bolita de pelo y Dee Dee tenia miedo pero la curiosidad le hizo acercarse. Creo que desde el primer día empezaron a jugar. Con Polar si tuve que tener más cuidado pues a veces se despertaba el instinto de depredación, lógico es un podenco. Y Michi parecía un conejo. Pero pasada una semana o incluso menos ya pudimos descansar todos juntos en el sofa. Las primeras noches por seguridad de Michi las paso en un transportin amplio. A día de hoy dormimos todos juntos o mas bien con libertad de elegir donde dormir.
Para Michi fue facil porque mi casa al tener muchos sitios donde subirse, se sentía seguro al no poder ser «cazado». Los primeros días se pasaba el día escondido debajo del sofá, si si, era muy chiquitito, o debajo del hueco de la cocina. En poco aprendió a subirse a la mesa o a la encimera por lo que hay estaba seguro. En ningún caso forcé las interacciones, deje que cada uno se tomara su tiempo. Aunque Dee Dee tras el primer miedo que tuvo no paro de jugar con él. Se lo pasan genial. Polar a veces le hace caso, le chupa y poco más. Lógicamente aun sigo supervisando ciertos momentos pero ya puedo ducharme tranquilo o estar a mis cosas sin tener que preocuparme de Michi.
Para mi también esta siendo toda una experiencia puesto que nunca había vivido con un gato. Y una cosa os puedo decir, es un trasto. Mucho peor que un cachorro de perro. Aun asi es muy divertido ver como se sube por todos los lados. Como hace de rabiar a Dee Dee y a mi. Como se sube por las cortinas, encima de mi (ay como me tiene de arañazos). No me imaginaba que los gatos eran tan cariñosos o por lo menos Michi si lo es. Eso si es un llorón que no para de maullar cuando tiene hambre. Y los gatos comen muchas veces al día, y mas si le das BARF para gatos tienes que estar dándole de comer y limpiando bien el comedero. Además ya estoy informándome a través de libros especializados de las necesidades de los gatos para poderle la mejor calidad de vida a Michi.
Seguramente empezareis a ver a Michi en nuestro canal de Youtube también y empecéis a ver información sobre connivencia entre perros y gatos por aquí. Si te gusta mi contenido me ayudaría muchísimo que lo compartieseis en tus redes sociales favoritas para llegar a mas gente.
